Apenas abrí los ojos esta mañana algo me hizo recordar que hoy es 8 de marzo, de inmediato me vino a la mente a quienes debía felicitar, lo hice, pero apenas a unas pocas, no mas de cuatro, no las escogí siguiendo mi lista de contacto, en realidad no estoy seguro de la razón, pero si estoy seguro de que fue a aquellas a las cuales le podía decir algo más allá de una simple felicitación. Soy de los que creen que, si alguna acción común debo hacer, le debo poner un poco más de personalidad, pero tratándose de un día como hoy, me di cuenta de que no ha todas podía felicitar, incluso a aquellas que podían ser mis preferidas, bien fuese por la distancia, o el camino que pudiera tomar mi decisión.
Me preparé un café; mientras disfrutaba de el como cada mañana, me senté a leer algunas notificaciones y encontré una de la doctora Annabell Castro Turuseta, la leí detenidamente y me hizo reflexionar una vez más lo especial que ella es, su carácter y la manera tan segura como enfrenta cada aspecto de su vida. Ella fue la primera persona que en una ocasión me animo a escribir; después de ella, otra gran mujer Mirelys Z Velazquez, otra gran amiga eterna que siempre que le doy un abrazo, me hace recordar que esta siempre para mí.
A medida que seguía disfrutando de mi café y leyendo, me fui dando cuenta que crecía la necesidad de exponer lo que creo de aquellas mujeres a las cuales no podré decirle directamente lo que representan para mí.
Hay muchas maneras para admirar a una mujer, algunas de ellas, su simetría, proporciones y armonía, pero esas son definiciones físicas que la pudieran hacer más o menos bellas de manera subjetiva.
Cada una de las mujeres que conocemos a lo largo del tiempo, pueden ser caracterizadas por su seguridad personal, su carácter, su intelecto, su plenitud y su sentido espiritual.
Me es difícil expresar en algunas pocas líneas la contribución de manera general que han hecho cada una de aquellas a las que he conocido; pero si me gustaría que entre todas las posibles caracterizaciones que pudieran tener, se vean representadas en mis ideas; que cada una de ellas siga soñando con aquello que nos permitió estar cerca y compartir momentos inolvidables, en especial con aquellas que creamos nuevas vidas y construimos sentimientos de todo tipo, esos sentimientos que nos hacen sentir diferente en la vida y que de alguna manera nunca estarán ausentes.
Felicidades a todas.