Antes de la pandemia me había propuesto ir a un concierto a ver y escuchar a uno de los mejores Piano-Man que he escuchado. Pero como era de esperar, la pandemia cambio muchos planes, he incluso, la vida y conducta de muchas personas.
Una vez volvió todo un poco casi a la normalidad, supe la fecha postpuesta ya de esa espera. No me apresure en comprar las entradas, pues aprendí de mi amigo Fernando Fiore, que para ese tipo de acciones a tan mediano o largo plazo no vale la pena correr el riesgo de comprar entradas hasta estar completamente seguro de que podrás ir; esa ha sido una de esas lecciones que he aprendido en la vida, todo puede cambiar tan pronto como surge una chispa, incluso el deseo.
Estando seguro de que podía y aun teniendo muchas ganas, compre las entradas para ver y escuchar a Bruce Hornsby, la gira se reanudo finalizando la primavera del 2021 y para noviembre estaba proyectado llegara al sur de florida sin su banda “The Noisemakers” para solo tocar a piano todos sus temas.
Aprovechando el tiempo de inactividad durante la pandemia el teatro había sido renovado, de hecho, yo había estado monitoreando los arreglos que se le estaba haciendo al teatro en sí, ya que no lo conocía y justo buscando información sobre el evento pude ver fotos de la renovación que se le estaba haciendo. Hermoso teatro en el Condado Broward se llama The Parker.
Al comprar las entradas, le comenté a tres amigos con mucho orgullo que lo había hecho, a uno (el Robert) le argumente que trataba de recuperarme emocionalmente de tanto mal pensamiento, me lo celebro mucho ya que el incluso conoce la obra musical de Bruce. Al segundo (Maikel de Los Reyes) nunca encuentra nada mal en lo que comento, pero al tercero (mi amigo Luisito el policía), si le resulto cierta inconformidad. Inicialmente me cuestiono como podía ir solo a un concierto. Pero solo fueron suficiente dos minutos para comprender que, a quien podía invitar a escuchar esa música; más bien yo comprendí el motivo de su reacción cuando el lo que trataba de insinuarme que buscara quien me acompañara.
Finalmente fui solo, antes de llegar al lugar cene en un pijo restaurante de Sunny Isles Beach a la orilla del mar y recuerdo que tome unas fotos espectaculares del atardecer visto desde la A1A, se notaba todo un color muy cálido sobre la ciudad.
Llegué al teatro con mucho tiempo de antelación y tuve que gastar un poco de tiempo recorriendo la zona. Llegado el momento, estacione mi auto en el parqueo organizado como de costumbre para cada evento. Una vista panorámica del entorno note que solo había muchas personas pasadas de los 50 años y en pareja, pero justo cuando me acercaba a la puerta, escuche una voz con acento cubano hablando al teléfono. Me volteo a mirar, ya que me llamo la atención y escucho que pide encarecidamente que le envíen una foto del carnet de vacunación. Me acorde que yo había dejado el mío en el auto, ya que es el lugar donde siempre lo he preservado. Y en efecto, de no haberlo tenido, quizás me hubiera perdido la posibilidad de escuchar y ver a Bruce Hornsby.
Luego ya dentro del teatro, me sucedió algo tan inesperado que creo no podre nunca olvidarlo, el teatro estaba sold out y mi butaca estaba ubicada muy cerca de una zona para las personas minusválidas que acuden en silla de ruedas. Al verificar mi puesto noto que una señora lo tenia ocupado, ella se disculpa y trata de explicarme con mucha angustia que lo había hecho para estar cerca de su esposo que estaba en una silla de ruedas. Antes esa explicación, me tomo mas de una vez preguntarle cual era la butaca que le correspondía a ella y que yo tomaría su lugar. Pero fue una reacción por parte de ella tan preocupante para mí, ya que ella no podía creer que me tomara tan indiferente hacer ese cambio; incluso me pregunto en varias ocasiones si no me molestaba por eso. Eso da un poco la medida con el estado de crispación que se vive hoy en día en la sociedad.
Una noche diferente y mágica escuchar a Bruce tocar y cantar con esa voz tan característica que él tiene. Es de esos artistas que cuando salen al escenario, solo importa su arte, no hay nada especial en el vestuario de él, en la escena, ni tecnología visual que adorne sus shows, solo música y melodía vocal, todo simple, hasta su interacción con el público es muy cercana. Conto anécdotas de muchas de sus canciones en el momento que las escribió, reímos y compartimos todos ya que se notaba a simple vista que todo el que estaba en ese lugar tenia el mismo respeto y admiración por su obra musical y personal.
De esa noche les dejo parte de esos momentos, bruce es un musico que ha sido capaz de hacer mas de 100 versiones de una misma canción, ya que su capacidad como musico es magistral al piano y la acordeón.
Pero en particular esta versión de The End of The Innocence, compuesta a dúo por él y Don Henley, guitarrista del grupo Eagles, incluye un solo de piano con algunos arreglos maravillosos, incluso en el momento en que el solo de piano finaliza el publico reacciona y el, incluso interpretando la canción todavía, en forma de broma da las gracias dejándole saber que aun quedaba más por escuchar.
Disfrutar de una noche como esa, es de las que agradezco siempre en silencio, muchos sueños de mi juventud se juntan y haber compartido con muchas almas aquellas experiencias me acompañaron toda la noche.
El video fue subido hace solo unos días al canal de Bruce en Youtube.